Es la capacidad de prestar atención
de manera consciente a la experiencia del momento presente, con interés,
curiosidad y aceptación.
El objetivo es lograr un
profundo estado de consciencia durante la sesión de meditación, la idea es
relajarse y no elaborar juicios de nuestras sensaciones, sentimientos o
pensamientos. La práctica del mindfulness consigue separar la persona de sus
pensamientos para poder reconocerlos y poner en duda los patrones mentales, otorgando
el aquí y el ahora mediante la atención total del presente.
Debería practicarse durante
media hora todos los días, pero inicialmente se podría comenzar con 10 minutos
para ir aclimatando la mente e ir construyendo poco a poco estados mentales de
meditación. Es de destacar que requiere tiempo, para que las personas que se
les complica se cansen y abandonen la rutina, es solo disciplina.
El sitio es un papel muy
importante a la hora de hacer la práctica, debe estar libre de ruidos, desactivar
alarmas, notificaciones del celular, y cualquier tipo de ruido que nos desconcentre. Usar ropa cómoda, quitarse el calzado y demás elementos que haga sentir el
cuerpo oprimido.